Con los alumnos de 1° año en la materia Plan
de Búsqueda, una de las herramientas de nuestro sistema CEPT, surgió el tema
“Dichos Populares” debido a que en el campo se aprenden diferentes
conocimientos que surgen de lo cotidiano.
Los
siguientes dichos fueron propuestos por los alumnos y sus padres:
-
…El que se quema con leche, ve la
vaca y llora…
-
…Chancho limpio nunca engorda…
-
…Más compadrón que caballo de
desfile…
-
…Tiene más vuelta que corral
redondo…
-
…El único que se rasca para afuera
es el perro…
-
…Más volvedor que caballo mañero…
-
….Tiene más humo que mensaje de
indio…
-
…Más vuelta que churrasco a la
plancha…
-
…Más vale pájaro en mano que cien
volando...
-
….A caballo regalado no se le miran
los dientes…
-
…Cortito como patada de chancho…
Y también una fábula “bien campera”.
El zorro y el quirquincho
Un día hicieron una
sociedad el zorro y el quirquincho. El zorro le dio su chacra al quirquincho
para que la sembrara, con la condición
de que las ganancias fueran a medias.
Como el quirquincho
tiene fama de ser poco inteligente, pensó el zorro que se aprovecharía de su
trabajo y le dijo:
-Este año,
compadre, será para mí todo lo que den las plantas arriba de la tierra, y para
usted lo que den abajo.
-Bien, compadre-contestó el sembrador.
El quirquincho sembró papas. Tuvo una
magnifica cosecha y al zorro le tocó una gran cantidad de hojas inservibles.
Al año siguiente,
el zorro, molesto por el malo negocio, dijo a su amigo:
-Este año, como es
justo, será para mí lo que den las plantas bajo tierra y para usted lo que den
arriba.
- Bien, compadre,
será como usted dice.
El quirquincho sembró trigo. Llenó su granero
de espigas y al pobre zorro le tocó una cantidad de raíces inútiles.
- ¡No me dejaré
burlar más!, pensó para sus adentros el zorro y le dijo al compadre- Este año,
ya que usted ha sido tan afortunado con las cosechas anteriores, será para mí
lo que den las plantas arriba y abajo dela tierra. Para usted será lo que den
en el medio.
- Bien, compadre,
ya sabe que respeto su opinión.
El quirquincho
sembró maíz. Sus graneros se llenaron de magnificas espigas y al zorro le
correspondieron las flores y las raíces del maizal.
El zorro tuvo que
vivir en la última miseria. Ese fue el castigo de su mala fe.
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